Soy un narrador visual y vivo en Caracas, mi actividad está enfocada, definitivamente, en la fotografía callejera, tratando de reflejar de alguna manera el pulso de mi ciudad, el ir y venir de su gente en el día a día, su luz, sus sombras, colores y en cierto modo su arquitectura. Me gusta la calle porque es un mundo que cambia cada segundo. No reclamo nada más de lo que daré en la vida. Tan solo soy un marcapasos de mi ciudad. Soy un hombre de pocas palabras, por eso uso la fotografía como expresión.
Llegué a la fotografía luego de una enfermedad y cumpliendo 70 años, no sabía qué hacer con mi vida y fué como una epifanía, de repente no sé por qué, se me ocurrió comprar una cámara y en menos de lo que canta un gallo, me enamoré de la fotografía con la pasión de un adolescente.
Ahora me gustaría exponer mis fotos y mostrar lo que han aprendido mis ojos.
