Editorial

Buenos días y feliz domingo a todos. Llegamos a nuestra edición número 230, firmes en el compromiso de traerles la mejor selección de lecturas. Aquí vamos las entregas de esta semana.

Abrimos con Clifford Thurlow, quien comparte su experiencia de haber asistido al concierto que el entonces muy joven Bob Dylan ofreció en el Royal Festival Hall de Londres en 1965. Pocos podían imaginar la revolución musical que se avecinaba.

Después les presentamos los particulares deportes que practica Leonor Henríquez por esta época y el no menos curioso contrato matrimonial que nos ofrece Alfredo Behrens.

Lucy Gómez escribe admirada de la vigencia de las casas de telas y modas, que ella creía parte del pasado, mientras Victorino Muñoz exalta las propiedades del helado como la panacea para cualquier mal. Luli Delgado nos invita a ser mejores y nos cuenta las ventajas que esto conlleva. José Manuel Peláez se pierde en Lisboa, pero encuentra quien lo oriente, Getulio Bastardo comparte su frustración como psiquiatra y Suzan Matteo nos habla de una paloma mensajera condecorada por sus buenos oficios durante la Segunda Guerra Mundial.

Además, incluimos El mundo de Clara, un crucigrama elaborado por Angélica Tovar, y nuestra sección Cartas a la gente que cuenta. Como verán, hay lectura para un buen rato, y esperamos que sea de su agrado y la compartan con su gente querida.

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En esta oportunidad, los dejamos con la obra Terraza de la casa de campo en Saint-Germain, que August Macke realizó en 1914. Sobre el nombre del artista, encontrarán un enlace a su biografía.

Muchas gracias por leernos y hasta nuestro próximo encuentro. Que tengan una excelente semana.

Saludos,

La gente que cuenta