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Los años son, pues, mi mordaza, oh mujer.
Sé demasiado, me convierto en mi saber…
Silvio Rodríguez
Más que la canción, ese fragmento de la canción Con diez años de menos de Silvio Rodríguez, es lo que más ha venido a mi mente mientras leía el libro de Irene Vallejo El infinito en un junco. Y no porque tengan alguna relación en cuanto a tema.
De hecho, ambos, libro y canción, abordan asuntos disímiles. Es mi mente, mi experiencia o mi edad como lector los que establecen la relación. La cuestión es que, antes de leerlo, el texto de Irene Vallejo me causaba no poca curiosidad e interés, hasta el punto de que lo busqué y encontré. Pero…
El libro en sí no tiene nada de malo. Tal vez todo lo contrario, diría yo, si no fuera quien soy. Es que mientras lo leía me encontraba con muchas cosas que ya sabía por Chartier, Alberto Manguel, Umberto Eco, el mismo Borges, y otros tantos que han hablado de la historia de la textualidad y la lectura.
Porque de esto es que básicamente trata El infinito en un junco, un poco salpimentado con la vida y experiencia personal de la autora. Salvo esto último, lo demás me resultó un poco agua pasada; nada que no supiera yo o que no sepa alguien que haya leído algunos libros o visto algunas películas.
Sí, está muy bueno el texto. Irene Vallejo escribe precioso. Pero me hubiera gustado tener diez años menos, o quizás unos treinta. Alguien diría que uno puede tratar de ponerse en modo olvido todo lo que sé y lo leo como si no lo conociera. Mas, yo no sé cómo se desactiva la memoria.
Si Silvio hablara con su novia más joven tal vez le diría la consabida frase: no eres tú, soy yo. Igual que haría yo con Irene Vallejo, quien me sigue pareciendo una mujer muy atractiva (y lo digo en serio, porque para mí no hay nada más sexy que la inteligencia).
No es tu libro, Irene: soy yo; son las lecturas que llevo acumuladas; son las cosas que ya sabemos y no olvidamos las que se convierten en una pesada carga y que parece que nos hacen sentirnos más viejos como lectores que como personas.
Con todo, yo recomiendo la lectura de El infinito en un junco, pero con la salvedad de que, si usted es un profesor de literatura y ha escrito e investigado sobre historia de la lectura, puede que le resulte mejor escuchar a Silvio Rodríguez.

valenciano, autor de “Olímpicos e integrados”, ganador del Concurso de Narrativa Salvador Garmendia del año 2012 y “Página Roja”, publicado en la colección Orlando Araujo en el año 2017.
rvictorino27@hotmail.com
Twitter:@soyvictorinox
Foto Geczain Tovar