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El único concurso en el que he participado fue en uno organizado por un cura que dirigía un programa de tv cuando era pequeña. Había que escribirle. Todas las cartas iban a parar a un bombo y luego de dar unas vueltas se escogían las ganadoras. Los premios eran varias cajas de cartón, llenas de paquetes de galletas. Efectivamente, mi carta fue escogida y aunque ese no era un concurso de aptitudes o de belleza sino de pura suerte, estuve feliz con mis galletas un buen tiempo.
Luego, no se me ocurrió concursar en más nada. Siempre estuve consciente de mis limitaciones en cuanto a belleza estándar como para ir a matricularme en algún “Miss algo”. Lo único que hice en función de mi aspecto, para no convertirme en la gorda de la clase, fue empezar temprano a hacer dietas y ejercicios, con lo cual logré un aspecto más o menos normal.
Pero eso no significa que no me llamaran la atención los concursos de belleza, de cocina, de aventuras, de esos donde dejan en una isla o en una mansión a un grupo de gente a ver cómo se las arreglan, o bien los concursos literarios, una mina para los editores.
Entrar en un concurso de esos, no solo es cuestión de habilidad, potencial y conocimientos, sino de estómago y sangre fría.
Unos familiares, fans de los platos que cociné en una época, me preguntaron por qué no me presentaba a un Master Chef que convocaba aficionados. Les dije que me parecía que el ambiente era muy tenso… Igual con los concursos de preguntas y respuestas sobre conocimientos enciclopédicos, donde hay un fondo de dinero que crece de programa en programa cuando alguien se equivoca. Entonces suena una campana o un timbre y lo echan. Despiden a la mayoría, en verdad.
Así que me parece que todo el mundo debe concursar. Me viene muy bien porque lo que verdaderamente me gusta es ver a los participantes enfrentarse. Mientras, tomo partido por alguien que cocine el mejor soufflé, termine primero de edificar una casa o encuentre en unos trasteros algún tesoro.
Los concursos no solo se preparan con concursantes, sino con espectadores especializados como yo.

es experta en el cultivo de huertos de hortalizas y flores.
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