
Retrato de Giovanna Tornabuoni, (detalle) 1488-1489
Por decisión irrevocable de la Corte Suprema de Anónimo y de Interés Colectivo, fui condenado a veinte años renovables de mediocridad activa y desterrado a un pequeño pueblo donde la población, eternamente reconocida como a quien se puede agradecer la apatía que el destino nos ofrece, me miraba de lado, para poder arrugar la nariz y sonreía como quien no le gusta sonreír. Con suerte y paciencia terminé encontrando otros que en su momento el mismo tribunal, también por decisión irrevocable, no dudó en condenar por haberse atrevido a cuestionar los fundamentos de nuestro bienestar anónimo y colectivo. Algunos, con el tiempo, habiendo olvidado el motivo de su condena y renunciando a lo que alguna vez pensaron que podría llegar a ser, me miraron con simpatía, disimulando la pequeña llama de una vela que en la opacidad de su mirada insistía en brillar. Generosamente me aconsejaron que me conformara con el conformismo que tarde o temprano nos espera, como la luna espera que brille la noche. Una de ellas, sin embargo, una mariposa con las alas quemadas, al ver que nadie nos escuchaba, me miró fijamente y casi en silencio murmuró una sencilla frase que me dejó sin respuesta: “¿De qué sirve un alma grande si la vida es pequeña? “
A Luli Delgado

Como ficcionista publicou: “Sobre outra coisa ainda” (13 short stories), Coleção LPF 20, X11, Edições esgotadas, Porto 2018; “Neste sonho que sou de mim”, Coleção LPF 20, X1, Edições esgotadas, Porto 2020. Como se de outro ela fosse, Edições esgotadas, Porto 2023
Fotografía: Gabriel Moralez