¿Por qué escribo?
por Soledad Morillo Belloso

Escribo porque el silencio se llena de preguntas, porque las palabras son la única forma de sostener lo que escapa, porque la vida, sin relato, se disuelve como arena en el viento.

Escribo para no perderme, para dejar un rastro en la piel del tiempo,
para nombrar lo que duele, lo que arde, lo que sana. Las palabras no son solo tinta en papel, son un grito que atraviesa el vacío, una mano extendida en la noche más oscura.

Escribo porque el olvido acecha en cada esquina, porque el mundo cambia demasiado rápido y quiero atrapar un instante antes de que desaparezca.

Escribo porque el dolor necesita forma, porque la alegría quiere ser compartida, porque el amor merece ser pronunciado. Porque en cada letra hay un latido, en cada frase un eco, en cada historia un pedazo de lo que fui, de lo que soy, de lo que aún no sé qué seré.

Escribo porque no sé cómo no hacerlo, porque las palabras me han salvado más veces de las que puedo contar, porque en cada página encuentro un reflejo, un hogar, una voz que sigue resonando cuando todo lo demás se ha ido.

Escribo porque el silencio es una herida que no cicatriza, porque las palabras son la única forma de gritar sin romperse, porque la ausencia se viste de tinta para no desaparecer del todo.

Escribo para sostener lo que se escapa, para nombrar lo innombrable, para tocar con letras aquello que la piel no puede alcanzar.

Escribo porque la memoria es frágil, porque si no escribo, las historias mueren en el vacío como estrellas que nadie vio apagarse.

Escribo porque la tristeza necesita cuerpo, peso y contenido, porque el amor se vuelve eterno cuando se pronuncia.

Escribo porque el mundo es efímero, porque la vida se escapa entre los dedos, porque en cada página dejo un rastro que algún día alguien encontrará y sabrá que estuve aquí.

Escribo porque no sé cómo no hacerlo, porque la tinta es más real que la sangre, porque en cada línea dejo mi piel, mi sombra, mi verdad.

Escribo porque si no escribiera, no existiría.

de la misma autora