Autor desconocido,
Ícono ruso del S. XVIII
El pasado 6 de diciembre fue el Día de San Nicolás de Bari, patrono de Rusia, de Grecia, de Turquía y, desde 1676 en Venezuela, de Porlamar.
Nicolás, cuyo nombre significa “protector y defensor de los pueblos” fue un obispo cristiano que vivió en el siglo IV d. C. Nació alrededor del año 270 en Patara, en lo que hoy es Turquía, y murió el 6 de diciembre del año 343 en Myra, también en Turquía. Fue tan querido que alrededor del mundo se construyeron más de dos mil templos en su honor.
La tradición cuenta que en Myra, a la muerte de su obispo, estaban buscando a un sucesor y decidieron que sería la primera persona que entrara al templo… ¡Zas!, entró Nicolás sin saber lo que pasaba y terminó siendo el elegido.
Ahora bien, en el oriente lo llaman Nicolás de Myra, por la ciudad donde fue obispo, pero en el occidente se le dice Nicolás de Bari. ¿Por qué? Porque cuando los musulmanes invadieron Turquía, unos católicos sacaron en secreto sus restos y los llevaron a la ciudad de Bari, en Italia.
Y te preguntarás ¿de dónde surgió la devoción a San Nicolás como generoso repartidor de regalos, así como la tradición de dejar obsequios en calcetines el 6 de diciembre, como parte de la celebración navideña en muchos países europeos?
Una de las muchas leyendas cuenta que en su ciudad natal, debido a una mala racha económica, un padre decidió vender a sus tres hijas. San Nicolás, en secreto, arrojó bolsas de oro a través de una ventana, para que fuesen a caer en calcetines frente a la chimenea. Ello salvó de su triste destino a las muchachas, pero fue descubierto por el padre que, desde entonces, se dedicó a pregonar la generosidad del obispo por todas partes.
La imagen moderna de Santa Claus tiene sus raíces en la figura de San Nicolás. La transformación de San Nicolás en Santa Claus ha sido por influencia de diversas tradiciones y leyendas a lo largo de los siglos. No es simplemente algo comercial: su asociación con la Navidad se fortaleció, especialmente en el mundo anglosajón, gracias a la influencia de la cultura popular.
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