Luis Julio Toro, artista venezolano de gran trayectoria musical, además es un destacado fotógrafo.
Miembro fundador de Ensamble Gurrufío (1984) y Camerata Criolla (2001), agrupaciones que, con distinto formato, se dedican a la difusión de la música tradicional y a la exploración de la riqueza sinfónica de la música hecha en Venezuela. Diversos han sido los reconocimientos recibidos durante su carrera.
Las imágenes pertenecen a la exposición Reliquias vivientes de El Llano. La muestra está conformada por las fotografías publicadas en el libro de Otto Gómez y Juan Vicente Carrillo-Batalla que lleva el mismo nombre.
Se trata de un proyecto sobre faenas, costumbres y artefactos de nuestros Llanos muy poco conocidos por quienes no hemos tenido una relación cercana con él y porque ya son muy pocos los verdaderos centauros que recorren sus mágicas sabanas a lomos de un brioso caballo.
El proyecto tomó varios años de muchos viajes para localizar y llegar a tiempo al encuentro de estos extraordinarios personajes que son los protagonistas de dichas fotografías en las que Toro se sumerge como testigo de sus más recias faenas conviviendo con ellos y captando con la cámara la esencia poética de tan singulares momentos.
En estas fotografías Luis Julio logra mimetizarse con ellos y mostrarnos el violento movimiento de jinetes “echando el lazo” o pronunciando un conjuro para la cura de un caballo, y nos sumerge en esa magia de la que habla el poeta Arvelo.
La muestra está compuesta por 17 fotografías en formato grande que nos transportan a un mundo, o, mejor dicho, a otro mundo, en donde sólo la profunda sabiduría de sus viejos habitantes puede enseñarnos esta reliquia viviente que es la vida en nuestro verdadero Llano.