Si por alguna razón al leer el título alguien pensó en el programa Nacional de Orquestas de Venezuela, definitivamente acertó con respecto al tema del presente artículo. El Sistema Texas es una fundación que busca replicar los logros del modelo arriba mencionado, al cual por supuesto le reconocen todos los créditos.
De hecho, sus fundadores y directivos formaron parte de dicho Sistema. Se trata del matrimonio compuesto por Rhomy López y Álvaro Carrillo, quienes junto a Jéssica Colmenares crearon una fundación comprometida con la educación musical y el desarrollo de las comunidades. Conozcamos a los protagonistas:
Rhomy López es una violinista venezolana, reconocida en la escena musical internacional. Sus inicios fueron en el Sistema de Orquestas Infantiles y Juveniles de Venezuela. Como miembro de la Sinfónica “Simón Bolívar”, trabajó bajo la batuta de directores de la talla de Gustavo Dudamel. Luego formó parte de la “Nueva Filarmonía” de Colombia.
Por su parte, Álvaro Carrillo, además de ser licenciado en música y miembro destacado de la Orquesta Sinfónica Teresa Carreño de Venezuela, ha desarrollado una brillante carrera como contrabajista, presentándose en escenarios de grandes festivales: Carnegie Hall (EE.UU.), Festival de Salzburgo (Austria), Berliner Philharmoniker en Alemania, Royal Festival Hall (Inglaterra), entre otros.
Y en cuanto a la maestra Jéssica Colmenares, quien actualmente se desempeña como directora del Coro Sinfónico Infantil Hispano de Texas, también comienza sus estudios en el Sistema Nacional de Orquesta Juveniles de Venezuela, donde recibe clases de cello, para proseguir luego en canto lírico con el maestro William Alvarado, destacándose como solista en diversos recitales y conciertos nacionales e internacionales.
Todos ellos han hecho posible esta realidad del Sistema Texas, un programa de educación musical e inclusión para niños hispanos en edad escolar, a través de la creación de orquestas y coros como instrumentos de organización social, llevando al siguiente nivel el sueño del Maestro José Antonio Abreu y demostrando no solo un gran profesionalismo, sino un profundo compromiso con la educación, con la música y con la sociedad.
Recientemente, esta labor les ha hecho merecedores de un reconocimiento de parte del Congreso del Estado de Texas, otorgándoles la distinción Yellow Rose of Texas. Y desde aquí, con total orgullo, los felicitamos y los instamos a seguir así, dando la buena nota por la música, por el país y por los niños del mundo.