Te quiero verde,
por Jeraige Reinoso
El perejil, originario de la cuenca mediterránea, ha acompañado a la humanidad por siglos, pasando de ser una hierba ceremonial en Grecia y Roma a un elemento esencial en la cocina latinoamericana. Su viaje histórico refleja cómo lo simple puede transformarse en símbolo de vitalidad.
La expresión “verde que te quiero verde” tomó un matiz culinario gracias a un reconocido chef venezolano, quien decía que cuando un plato parecía “apagado”, lo revitalizaba con perejil. “Apenas cae el verde, la comida revive”, comentaba, recordándonos que este pequeño toque vegetal también alimenta emociones y sentidos.
Más allá del color, el perejil es un aliado de salud. Su alto contenido de vitamina C, carotenoides y flavonoides como la apigenina le confiere propiedades antioxidantes y antiinflamatori...












