Gente que Cuenta

Compost, por Lucy Gómez

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“No hay nada como ver cómo después de echarles compost empiezan a crecer y a ponerse fuertes” Fuente: Wikipedia

 

Alimentar tus plantas con restos de comida y desechos del entorno doméstico es una de las maneras más seguras de fortalecerlas. Ahora se llama compost, pero los restos de vegetales, las cáscaras de huevo, las hojas que quedan de las podas, los pedazos de madera acumulados en cualquier parte empezaron a llenarse de plantas nuevas en algún rincón, en alguna época. Seguramente a algún curioso se le ocurrió la idea de repetirlo en su huerto, logrando más flores y más tomates.

Los lechos de los ríos crecidos dejaban también un limo fértil, desde que los faraones se paseaban por el del Nilo y en los bosques y selvas la descomposición de troncos y los huesos de animales, quemados tras los incendios periódicos, revivían la espesura. Todas estas prácticas son precursoras del compost de hoy.

En este momento, con esa ansia simplificadora y utilitaria que nos caracteriza, le hemos buscado rentabilidad a esas experiencias, porque se trata, por lo menos para algunos, de sobrevivir en ciudades más frescas y respirables, cosa que no se logra sino trabajando por eso.

Hay que cultivar forzosamente, no sólo para comer sano sino para frenar el exceso de calor, la contaminación y la fealdad que inundan a estos desiertos, lleno de edificios grises forrados de cristales, sin árboles, pájaros ni mariposas, que se llaman ciudades.  Hay que utilizar los restos de frutas, los pedazos de madera y cartón, el pelo de personas y animales, el papel de periódico, las hojas y las flores pasadas, para que se conviertan en comida de nuestras plantas, después de acumularlas, regarlas, airearlas y revolverlas unos meses.

Les garantizo que les encanta. No hay nada como ver cómo después de echarles compost empiezan a crecer y a ponerse fuertes. No es necesario que las alimentes todos los días, como hacemos nosotros, basta hacerlo al principio de una temporada de crecimiento. Es una sensación extraña, morder una hortaliza alimentada con nuestro compost.  Es como mordisqueáramos las tardes de nuestra vida que valen la pena.

Lucy Gómez e1647642232444
Lucy Gómez Periodista, egresada de la Universidad Central de Venezuela. Fue jefe de redacción y de la sección política, de varios diarios de Caracas y Valencia, durante más de veinte años.
es experta en el cultivo de huertos de hortalizas y flores.
lucygomezpontiluis@gmail.com

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