Al norte, vías llenas de asombro, o fruición, improvisado pentagrama.
Recorrí con la punta de mis dedos, depresiones geográficas, lagos oscuros, cavados por aguas subterráneas de color violeta.
Pero aún quedan en ese plano, praderas suaves, inexploradas, donde quizás el tiempo cave sus profundos surcos, algún día.
Con cierta satisfacción le sonreí al espejo.
Miré mi rostro navegado de amor y tiempo. Esa cartografía de piel que acentúa mi Mare Nostrum, mis archipiélagos, mis continentes, mis caminos recorridos y por recorrer.
En cristiano, mis arrugas. Mi mapa espiritual.
Leonor Henríquez (Caracas, Venezuela) Ingeniero Civil de profesión (UCAB 1985). Escritora y aprendiz de poeta por vocación. Desde muy joven participó en talleres de escritura creativa en el CELARG, Caracas. Sus ficciones fueron publicadas en la antología Voces Nuevas (1990-91), y más adelante su testimonial, Existe la Luz (1995). De su paso por la ingeniería surgieron sus Cuentos de Oficina (1997), otra manera de ver al mundo corporativo. Entre sus últimas publicaciones se incluyen sus reflexiones sobre el duelo, Hopecrumb (2020) y “The Adventures of Chispita” (2021), cuento infantil, una alegoría de la vida en el vientre materno. Hoy en día comparte sus “meditaciones impulsivas” desde Calgary, Canadá, ciudad donde reside. leonorcanada@gmail.com