Morenita y delgada es la arepa que aparece en las cocinas de las casas del páramo venezolano a la hora del desayuno. Y es así porque a diferencia de su hermana blanquita, ésta se elabora con harina integral proveniente del trigo y no del maíz.
Se trata, entonces, de una tradición que ya existía antes de la llegada de los españoles, y cuya elaboración hasta el día de hoy se ha conservado intacta.
…el ingeniero Luis Caballero Mejías, logró reducir al mínimo su proceso de preparación y llevarla al estado precocido que conocemos hoy.
Así, mientras en las montañas andinas la tierra se prestaba para la siembra del trigo, en las cercanías del Caribe, los temibles indios de la tribu de los Cumanagotos, llamaron “Erepa” (se ignora el origen de la palabra) al curioso bocadillo redondo y panzón con el que invitaron a un complacido y glotón conquistador español.
Eran bastante más difíciles de preparar. Había que pilar el maíz, luego descascarlo y tirarle el lúmen, hasta que, en 1954, el ingeniero Luis Caballero Mejías, logró reducir al mínimo su proceso de preparación y llevarla al estado precocido que conocemos hoy. Patentó el producto como «Harina de Masa de Maíz» o «Masa de Maíz Deshidratada» y fundó para su fabricación y comercialización la empresa La Arepera, C.A.
Más adelante, por razones de salud, Caballero, le pidió a su esposa que negociara la patente con Lorenzo Mendoza Fleury. El precio acordado fue 275 mil bolívares, cantidad importante para aquella época. Poco después Caballero falleció en 1959, con apenas 55 años.
En manos de Mendoza Fleury, se comenzó a producir y comercializar lo que hoy conocemos como “Harina Pan¨, siglas de Productos Alimenticios Nacionales.
Hoy la morenita y delgada producida en el páramo, continúa su elaboración artesanal igual a la de siglos atrás, mientras su hermana, hecha ahora de maíz precocido, logró expandirse y convertirse en un producto de consumo diario de varios países.
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