Si buscamos en Google la palabra Armani, nos encontramos que no solo describe a un personaje, nos remite también a un universo, al bien llamado Emporio Armani, donde hay moda, perfumes, artículos de decoración. En definitiva, Armani es un hombre y todo el universo creado por él.
Hoy este caballero regresa con bombos y platillos a las primeras páginas después de presentar su colección titulada Solo una noche, que tuvo como escenario Venecia, coincidiendo con la Mostra, y en su primera fila se ubicaron reconocidas figuras vinculadas al séptimo arte, entre ellas su contemporánea Sofía Loren.
Tuve la oportunidad de hacerle una breve entrevista a Armani, al terminar su presentación en una pasada semana de la moda de Milán. Vestía su tradicional franela negra, que le daba un toque juvenil, contrastando con su aristocrática imagen derivada de sus ojos azules y su cabello blanco e impecablemente peinado.
Estar del otro lado del Atlántico ameritaba intentar hablar con él y lo hice. Aproveché para que me hablara de su colección, una presentación que por su perfección e impecable puesta en escena emocionaba hasta las lágrimas.
En este verano de 2023 lanzó una nueva colección que presentó en la Serenísima, claro homenaje a la ciudad que lucha contra los años, las inclemencias del tiempo y los abusos de los turistas.
Telas cuyo brillo metálico honran la riqueza del oro y la plata que con abundancia estuvo presente en el comercio veneciano, congeniaron con géneros etéreos como el tul, que recordó a la bruma que viste las mañanas invernales a la reina del Adriático y que le concede cierto aire de misterio; aparecieron rombos que hablan de los arlequines traviesos que reaparecen en su célebre carnaval. Estos son algunos de los elementos que caracterizan a esta colección creada por un hombre que a sus 89 años continúa al frente de su imperio.
Más allá del acto creativo, que requiere de buena energía, está la disposición al trabajo, revisar patrones, dar el visto bueno a una cadena de acciones que culminan con la puesta en escena y Giorgio Armani salió airoso y al culminar el desfile recorrió la pasarela para agradecer los aplausos.
Armani nos dice que cuando se ama lo que se hace no se piensa en la jubilación, que crear no tiene edad y que los años, lejos de ser una barrera, enriquecen. El diseñador nacido en Piacenza pareciera revisar en su memoria sus anteriores creaciones para traer estas sesenta y cinco propuestas en una nueva edición de One Night Only.
Algunos se preguntarán, ¿será esta la despedida del maestro de la elegancia? Nadie lo sabe, pero la emoción que esa noche manifestó es una clara evidencia de que estar vivo no es respirar, es sentir y, en su caso, crear belleza.