Enfrentando un diagnóstico,
por Jeraige Reinoso

Imagina una sala de consulta donde el profesional de la salud no solo examina los resultados de las pruebas médicas, sino que también inicia una conversación en profundidad con el paciente sobre su bienestar emocional. Se sumergen en las aguas de la salud mental, explorando las preocupaciones, el estrés y las emociones que podrían estar afectando la salud general del individuo. A medida que el diálogo se desarrolla, se desvelan las complejidades de la dimensión humana, arrojando luz sobre los desafíos y las fortalezas personales. Estas dimensiones están interconectadas y hay equilibrarlas ejerciendo un impacto en la salud a largo plazo.

1. Dimensión biológica: mantener un cuerpo activo, una dieta equilibrada y dormir adecuadamente. Una buena salud física proporciona energía, previene la activación de enfermedades y mejora la función del sistema inmunológico.
2. Dimensión emocional: gestionar las emociones contribuye a reducir el estrés, la ansiedad y la depresión. Desarrollar inteligencia emocional condiciona la percepción de los hechos y su procesamiento.
3. Dimensión psicológica/mental: implica mantener una mente activa, enfrentar desafíos cognitivos y buscar formas de relajación, recreación y el ocio. Evaluar creencias, aprender y reaprender.
4. Dimensión ambiental: vivir en un entorno limpio y saludable, con menor influencia de tóxicos, generar medidas para minimizar los riesgos ambientales, incluyendo el desarrollo de conexiones sociales significativas con amigos, familiares y comunidades.
5. Dimensión espiritual: encontrar significado y propósito en la vida. Desarrollar esta dimensión proporciona una mayor sensación de paz interior, esperanza y resiliencia frente a las dificultades.

En lugar de centrarse únicamente en una dimensión, es importante considerar todas ellas para lograr una salud integral y una calidad de vida óptima. El nuevo paradigma de diagnóstico en psiconeuroinmunología abraza las múltiples dimensiones de la vida, no solo se trata de atender enfermedades, sino de promover una vida plena y saludable en todas sus facetas, lo que desarrolla un efecto sinérgico en la salud.

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