Si repasamos todas las profesiones posibles, invariablemente nos vamos a encontrar con que, sin el contexto humano, éstas ni serían ni necesarias ni por fin tendrían sentido.Cuando educamos, curamos, informamos, fabricamos muebles o cosemos ropa, no hacemos otra cosa que servir a los demás. Y esos “demás” son, queramos o no, nuestra razón de base para lo que sea que hagamos de nuestra vida, nuestro requisito sine qua non.Podemos servir como cualquier cosa dependiendo de la profesión que cada uno haya escogido, pero de allí a servir en el senti...