Isabel viendo reír a Caracas – Francisco Olivares
Desde la memoria, Isabel Allende sigue mirando la risa del caraqueño como uno de los grandes valores de un pueblo al que no le costó amar cuando fue una de los tantos refugiados que llegaban por miles desde el sur de Latinoamérica y en especial desde Chile, quienes como ella se vieron obligados a huir del terror implantado por el general Augusto Pinochet.Ha expresado que lo que más recuerda de Venezuela es la alegría de la gente, la manera de hablar, esos chistes políticamente incorrectos que no puedes decir en Estados Unidos, ese humor generoso. “El que recuerdo de los venezolanos no tenía crueldad. Es reírse porque la vida es alegre. Una época muy linda, donde todo era hermoso”.Con pena infinita ve a millones de venezolanos que han dejado ese país excepcional. “En los años 70, cuando lle...