De la nada a la inclusión – Ingrid Mattiuzzi
La lengua italiana se adecúa a la nueva sensibilidad colectiva de la inclusión. ¿Por qué usar sólo el masculino como dictado por los Académicos? ¿Y las personas que no se reconocen completamente en uno de los dos géneros? En el campo de la moda hace rato que algunos modelos son neutros, en el maquillaje, en el baile. ¿Podemos ampliar los ámbitos? juguetes, colores, comportamientos, emociones, lágrimas... ¿sigo?
¿Podemos cambiar los ámbitos?
Aclarando que nadie obliga a nadie a una re-colocación de su vida íntima o social, hablamos de minorías que finalmente han podido salir a la luz después de años de ficciones, y deben ser consideradas también en el lenguaje. Por no hablar de la comodidad en referirnos con una sola palabra a todo el género humano: ¿por qué decir sólo "alumnos" o...