¡Música, maestro! – Luli Delgado
Tenemos ya varias entregas sobre cómo se hace cine. Hemos hablado de los guiones, sus puntos de giro y sus diálogos, del proceso de filmación y los equipos que lo conforman, de los magos del tiempo, creo que no dejo afuera más nada.
Vayamos ahora con la llamada trilla sonora.
Empecemos por decir que, así como las imágenes y los diálogos hicieron del cine un espectáculo cada vez más atractivo, la música tampoco decepcionó y puso muchísimo de su parte, si bien muchas veces haya pasado más desapercibida.
Entre los que contribuyeron a ponerla en su santo lugar, está Walt Disney con su Fantasía de allá por 1940, que la llevó al protagonismo.
Ya la música había adquirido cierta importancia, más a partir de ese momento el cine sin música pasó a ser impensable.
En líneas general...