News That Matters

Alfredo Behrens

Unidos pelo Sputnik, por Alfredo Behrens
62a, Alfredo Behrens

Unidos pelo Sputnik, por Alfredo Behrens

leer en español Augusto era recém-chegado àquela cidade. Aceitou o convite para um jantar com conhecidos onde uma garota chamada Maria fisgou sua atenção. Quando ela se levantou da mesa anunciando que estava descendo à rua para comprar cigarros, ele se ofereceu para acompanhá-la. Exceto por alguns gestos e comentários durante o jantar, ele não sabia nada sobre ela, mas gostava dela. No entanto, e apesar da audácia de se oferecer para acompanhá-la, Augusto estava inseguro nessa fase da sua vida, pelo que foi só quando voltavam que María abriu a conversa perguntando de onde vinha, como se quisesse saber quem ele era. Sem mais delongas, como que possuído por um impulso desesperado, ele pegou a mão dela e com o braço estendido apontando para o céu estrelado, representou sua avó como quando ela...
Passa um andarilho, por Alfredo Behrens
60c, Alfredo Behrens

Passa um andarilho, por Alfredo Behrens

leer en españolMeu querido amigo francês caiu na gargalhada quando lhe contei que descendentes de franceses e italianos se juntaram para acabar dando na minha mãe. Ele me explicou que na França era inédito um camponês se casar com alguém da cidade vizinha, muito menos de outro país.Mas a vida dá muitas voltas e, apesar de eu ter conhecido várias francesas amigas dele, aquela com quem se casou para sempre foi uma brasileira descendente de africanos que conhecera no Rio de Janeiro.Como era um sujeito querido, dançava maravilhosamente bem, seus amigos se acostumaram a esperar e aceitar quase tudo dele. Mas casar com uma descendente de africanos foi um pouco demais. Ajudou que os amigos dele não a entendessem e que o casal tenha morado muitos anos longe da França e do Brasil.Mas o tempo foi pa...
¿En quién creer?, por Alfredo Behrens
Alfredo Behrens

¿En quién creer?, por Alfredo Behrens

ler em portuguêsUn señor con aire de agricultor desorientado, de ingresos declinantes, salía de la clínica médica con una receta. Lo interpeló el agente de seguridad con quien el señor aparentemente había mantenido una conversación antes de entrar. El agente era un mozalbete fuerte, de esos con aire de instructor en gimnasios, pero que con gentileza le preguntó  qué le habían dicho. Solícito, el señor le mostró la receta y el mozalbete con aire circunspecto, de quien entiende del asunto, inclusive con su mano derecha en su barbilla y asintiendo con la cabeza mientras leía, le dijo que, por los síntomas que le había relatado, eso era lo que él esperaba que le fuesen a recetar. Además, le pregunto si tenía alguna alergia, y lo despachó diciéndole que si en una semana no mejoraba que volviera...
El osito de peluche, por Alfredo Behrens
Alfredo Behrens

El osito de peluche, por Alfredo Behrens

ler em portuguêsEl niño tendría unos siete años y cara de quien todavía se meaba en los pantalones. En un brazo sostenía un osito de peluche y con la otra mano agarraba la falda de la madre que estaba de pie comprando una pieza de pecho en la carnicería del supermercado. El carnicero estaba a punto de cortar el trozo cuando apareció este hombre de mediana edad que, en voz alta y frente a la gente que hacía cola en la carnicería, le pidió perdón a la mujer. Con la mirada y como que el pedido no era para ella, la mujer le indicó al carnicero que realmente quería que cortara el filete. Pero el hombre volvió a interrumpir pidiendo perdón, esta vez en voz aún más alta. El carnicero miró al que pedía perdón, como diciendo “mira, vete que estoy trabajando”.  Los presentes comenzaban a inquietarse...
Hay carbón que no arde, por Alfredo Behrens
Alfredo Behrens

Hay carbón que no arde, por Alfredo Behrens

ler em portuguêsQueen Loretta es una serie, disponible en Netflix, que vale la pena ver aunque no sea pretenciosa. La serie es polaca y sigue un camino relativamente familiar. Por un lado, tenemos los contrastes entre mundos pequeños, xenófobos, homofóbicos y un mundo más grande y evolucionado; por otro lado, tenemos el de las dificultades de quien quisiera moverse en ambos mundos pero que percibe rechazos en ambos. En términos de contrastes y dificultades, la película tiene mucho con lo que muchos inmigrantes podrían identificarse. Pero en Queen Loretta hay un giro adicional que evitaré para no crear un spoiler.A diferencia de muchas películas de Europa del Este de mediados del siglo XX, pienso aquí en Cenizas y Diamantes (1958) de Andrzej Wajda o Trenes Rigurosamente Vigilados (1966) de ...
Fofocas famosas, por Alfredo Behrens
54c, Alfredo Behrens

Fofocas famosas, por Alfredo Behrens

leer en españolNos tempos das Kardashians vale lembrar que houve um tempo em que se fofocava sobre cientistas.Foi o caso da Marie Curie quando teve um affaire com o ex-aluno de seu marido Pierre. Embora Pierre já tivesse morrido, o amante de Marie era casado; infeliz, mas casado. Sua esposa descobriu as cartas da Marie pedindo que ele se divorciasse e, enfurecida as enviou para um tabloide parisiense.Houve semanas de desordens frente a casa da Marie, durante as quais tudo foi dito sobre ela, até mesmo argumentou-se que ela era judia e uma destruidora de lares franceses. Tal foi a onda que se levantou contra ela, que o comitê do Nobel sugeriu que não aparecesse para receber o prêmio que lhe haviam concedido porque teria de apertar a mão do rei da Suécia e seria ruim se ele recebesse a mão d...
Ser o no ser, reconsiderado, por Alfredo Behrens
Alfredo Behrens

Ser o no ser, reconsiderado, por Alfredo Behrens

ler em portuguêsOigo decir, como si fuera pecado, que somos lo que comemos. Incluso podría serlo. Soy mucho más pesado hoy que cuando dejé de crecer en altura. Pero me niego a pensar que tiene algo que ver con lo que comí. Esa mousse de chocolate, esa nata montada a mano, esas pancitas de monjita, nada de eso puede ser pecado.Pero lo cierto es que la balanza muestra un cierto desequilibrio. Entonces, como la oruga, ¿seremos lo que comemos? Si ella, con esa dieta tan monótona, se convierte en una hermosa mariposa, yo todavía tengo esperanza. Con tanta barriga de monja que he trazado, yo no debería terminar en una polilla, ¿verdad?Si no hubiera espejos al emerger de la crisálida, ser mariposa o polilla no haría mucha diferencia. Es que no sé dónde terminará mi crisálida cuando me despidan.Si...
Ingenioso, no loco, por Alfredo Behrens
Alfredo Behrens

Ingenioso, no loco, por Alfredo Behrens

ler em portuguêsCervantes escribió que el Quijote era ingenioso, no que estaba loco. Podía sí, hacer "discretas locuras", pero esto no significa que estuviera loco.Que sus locuras fuesen discretas significaría hoy que serían comedidas o prudentes. Pero arremeter contra molinos de vientos no sería un comportamiento comedido, ni mucho menos prudente, pero sí podría interpretarse como un comportamiento insensato, quien sabe hasta jovial, o mismo hasta juvenil.Probablemente Cervantes seguía la lógica de Erasmus en su Elogio da Locura, libro que bien pudiera haber sido traducido como el Elogio del Disparate. Tal vez la locura del Quijote sea tan solo un error de traducción del latín, idioma en el que Erasmus escribió Encomium Moriae.Por ejemplo, sólo en un arrebato disparatado nuestros padres p...
O lado escuro da Lua, por Alfredo Behrens
50b, Alfredo Behrens

O lado escuro da Lua, por Alfredo Behrens

ler em espanholDizem que a solidão é má conselheira. Acho que eles estão certos. Um milhão de anos atrás, um sujeito estava mais solitário do que o sino da velha igreja. Estudava para o doutorado em uma universidade saxã onde, ao chegar, recebeu algumas instruções de seu tutor. No final delas o tutor também explicou que eles se cumprimentariam, se dando as mãos, duas vezes durante a sua estadia: a primeira vez já havia acontecido havia alguns minutos, e a segunda seria quando esse sujeito fosse embora de vez. Assim, ele percebeu que naquele lugar não haveria lugar para o amor.Mas, sedento de amor, o sujeito se apaixonaria pelas mulheres mais próximas; num supermercado conheceu a mulher paquistanesa de pele branca e longos cabelos negros. Ela era bonita e muito inteligente, mas se não fosse...
Extraños que se hablan, por Alfredo Behrens
Alfredo Behrens

Extraños que se hablan, por Alfredo Behrens

ler em português El metro, como un ascensor, parece ser una máquina de inhibición. Aunque ambos pasajeros están un poco apretados, la gente se ignora. Esto en muchos países, no en Portugal. El portugués es capaz de entablar una conversación con alguien que no conoce, incluso si sabe que la conversación no continuará porque sería raro que se volvieran a encontrar. Sabemos que los portugueses ganan poco, pero donde todos ganan poco, no hay brechas sociales. Quizá por eso los portugueses se sienten como un hermano de sus compañeros de metro, y por eso pueden iniciar, a la menor insinuación, una conversación entre iguales. Ilustraré, con un solo caso, pero he vivido varios similares. Estaba sentado en un área del vagón del metro donde dos pares de asientos están uno frente al otro. La dis...
Estranhos que se falam, por Alfredo Behrens
47a, Alfredo Behrens

Estranhos que se falam, por Alfredo Behrens

leer en español O metrô, como um elevador, parece ser uma máquina de inibição Embora em ambos os passageiros estejam algo ensardinhados, as pessoas se ignoram mutuamente. Isso em muitos países, não em Portugal. O português é capaz de entabular uma conversa com quem não conhece, mesmo que saiba que a conversa ficará sem continuação porque seria raro eles voltarem a se encontrar. Sabemos que o português ganha pouco, mas onde todos ganham pouco não há abismos sociais. Tal vez por isso o povo português se sente irmão do seu colega passageiro de metrô, e por isso pode iniciar, à menor deixa, uma conversa entre iguais. Ilustro, apenas com um caso, mas já vivi vários semelhantes. Estava sentado numa área do vagão do metrô dessas em que dois pares de poltronas ficam uma frente a outra. A dist...
Alfredo Behrens

Cuidado con lo que clicas, por Alfredo Behrens

ler em portuguêsCuando era chico me ponían contra el marco de una puerta donde medían mi progreso por la vida marcado mi altura a la fecha. Uno se mudaba de casa poco y ahí mismo quedaba el registro de nuestra vida a lo largo del tiempo.Ahora uno puede medir las fases de su vida por la publicidad que uno recibe por la Internet. Esta a mi me agarró maduro ya. Inicialmente recibía publicidad para extender mi pene. Siempre tuve la impresión de que alguna sinvergüenza me habría vendido.Pero más adelante me enviaban remedios para disfunción eréctil. Ahora ya ni eso, sólo recibo propagandas sobre las más variadas prótesis, muchas sobre aparatos auditivos, otras sobre implantes dentarios.Ya no me pregunto gran cosa, pero tiemblo al pensar que un día pueda comenzar a recibir propaganda de tumbas, ...