Picantes, por Lucy Gómez
Los llamamos ajíes, chiles, guindillas, rocotos, pimientos picantes. Arden en la boca y en la piel y son amados u odiados, no provocan reacciones tibias.Hace 7500 mil años se cultivaban ya en América: rojos, naranjas, amarillos, verdes. Cuentan que el nombre de pimientos se los puso Colón, porque cuando se los metió en la boca, tuvo la misma sensación de calor que da la pimienta. En cambio, el nombre de chile viene del náhuatl, chili. La planta es originaria de México, Centroamérica y Sudamérica. Los colonizadores, misioneros y comerciantes españoles y portugueses los esparcieron por Europa, el sudeste asiático y África en los siglos XVI y XVII.A mí me gustan. Pero entiendo el inmenso rechazo que producen en gran parte de mi familia, así que mis polvitos y mis salsas las cargo en porcio...