Noche de tormenta,
por Javier D. Volcán
El teléfono sonó pasadas las dos de la mañana. No me había dado cuenta de que llovía tan fuerte. El mensaje preguntaba si estaba dormido. La respuesta a la pregunta era obvia, así que me preocupé.- ¿Pasa algo? ¿Estás bien?-Sí. Todo está bien, pero tengo mucho miedo. La tormenta está muy fuerte. Las ventanas parecen se van a salir, y el agua está entrando por todos lados.Mientras escribía, yo buscaba los zapatos y terminaba de vestirme.-Voy para allá.No parecía que la tormenta terminaría aún. Y cuando escribió de nuevo ya estaba saliendo para su apartamento.Seguía lloviendo con fuerza. Había ramas rotas en la calle, la luminaria de uno de los postes colgaba de un cable, había piedras en el camino y mucho barro.Cuando llegué, ella se escondía tras una columna del estacionamiento. No era una ...