News That Matters

Rafael Victorino Muñoz

Arepología,<br/> por Victorino Muñoz
124c, Rafael Victorino Muñoz

Arepología,
por Victorino Muñoz

Tras mucho reflexionar concienzudamente, he llegado a un alto grado de conocimiento acerca del asunto. Sin embargo, fue por azar, como una súbita iluminación, que logré dilucidar uno de los mayores enigmas que acongojan a la población venezolana: ¿qué va primero, la harina o el agua? Como se sabe, esta vasta discusión filosófica ha agotado tanto las mentes más sesudas, como aquellas que solo se lanzan a opinar de manera irreflexiva, sin llegar ninguna de las dos partes a la solución. Pero, hela aquí, gracias a mi mente clarividente: no es el orden de la harina o el agua lo que importa, ¡es la proporción entre las partes! Brillante, ¿no? Y la verdad siempre es así, clara y sencilla (perdonen mi emoción). Sí, señor; ya lo decía Winston Churchill, hombre sabio donde los haya: tod...
La NBA lo vuelve a hacer,<br/> por Victorino Muñoz
123b, Rafael Victorino Muñoz

La NBA lo vuelve a hacer,
por Victorino Muñoz

Hace algún tiempo emití algunas críticas por las sanciones que recibió Kyrie Irving, suspendido sin paga por haber dado like a una película con contenidos antisemitas. En ese momento me preguntaba si el hecho de tener una opinión equivocada podía ser considerado una razón para que te suspendan de un trabajo.Pero, la caza de brujas continúa en esa liga de baloncesto, considerada la mejor del mundo. Ahora le ha tocado el turno a Ja Morant, jugador de los Memphis Grizzlies, quien por segunda vez es castigado debido a un asunto relacionado con posesión de armas.Hasta donde pude ver, Ja Morant apareció en un video en el que estaba en un carro junto con otro compañero, escuchando música. En un movimiento, se notaba que el jugador tenía un arma en el pantalón.No la estaba mostrando, no estaba ame...
Al mal tiempo,<br/> por Victorino Muñoz
122c, Rafael Victorino Muñoz

Al mal tiempo,
por Victorino Muñoz

El optimismo también tiene sus detractores. Y en estos tiempos en los que todo se critica, nunca falta quien diga que es una tontería andar con una sonrisa ante la adversidad o creer que con la alegría vamos a remendar el capote, aún sin aguja ni hilo. Y yo digo que es verdad, pero aún así me da la gana de mantenerme con la creencia de que va a salir bien lo que haga, que voy a terminar un día lo que inicie hoy y que se enderezará lo que por ahora anda torcido. Si así no lo creyera, entonces, no empezaría tarea alguna ni continuaría las que ya tienen rato andando. Dejaría todo a medio hacer, sin acabar nunca nada. Y no es mi costumbre, ya que hacer las cosas por la mitad es mal gasto sin ganancia. Mejor esforzarse un poco más y ya verle el queso a la tostada. Yo soy de los que...
Perdón póstumo,<br/> por Victorino Muñoz
121b, Rafael Victorino Muñoz

Perdón póstumo,
por Victorino Muñoz

Después de las consabidas fórmulas para dar el pésame a los familiares o expresar el dolor por la pérdida, además de las frases que quieren parecer profundas, irónicas o chistosas (“solo se nos adelantó”, “para allá vamos todos”, “nos vemos pronto”, etc.), entre las cosas que más se escuchan en un funeral se encuentra la palabra perdón, esta vez dirigida a la persona fallecida. Por lo común tal solicitud de clemencia proviene de las personas más allegadas, y suele venir acompañada de verdaderas demostraciones de pesar. Aclaro que, a diferencia de lo que hago habitualmente en mis escritos, estoy hablando con total seriedad, sin un asomo de burla o sarcasmo. Pese a que no soy muy solemne, respeto la memoria de las personas fallecidas y a sus familiares. Por eso, aunque a veces no m...
La obra maestra de Michael Jackson,<br/> por Victorino Muñoz
120b, Rafael Victorino Muñoz

La obra maestra de Michael Jackson,
por Victorino Muñoz

Aunque no sea la novela más nombrada de Honoré de Balzac, “La obra maestra desconocida” es una pequeña joya, una narración que prácticamente le hace honor a su nombre. En la misma se cuenta la historia de un pintor que estaba creando lo que se pensaba sería una obra perfecta; y la trabajaba, retocaba, repintaba y arreglaba constantemente. Tal era su anhelo de perfección. Pero nunca la mostraba a nadie.Sin embargo, un día alguien la ve, por un atrevimiento de la persona y descuido del artista. La que se pensaba sería la obra cumbre, resultó una Babel, tan frustrada como la del mito; o algo peor: una aberración. Y al verse descubierto el pintor se da cuenta o se admite a sí mismo que lo que ha hecho es ni más ni menos que una monstruosidad. Por supuesto, decide quemarla, inmolándose a su vez...
Historia de los dos tercos,<br/> por Victorino Muñoz
119c, Rafael Victorino Muñoz

Historia de los dos tercos,
por Victorino Muñoz

En un puente muy estrecho, por el que solo puede circular un carro a la vez, se encuentran dos conductores, huelga decir que al volante de sendos vehículos. A la mitad se ven obligados a detenerse.Al mismo tiempo, se hacen señas de que el otro es quien debe retroceder. Nadie cede. Uno de ellos apaga el motor; el otro lo secunda. Ambos bajan del vehículo. Ninguno de los dos profiere palabra, pero se miran altivamente, desafiantes.De pronto uno abre la maleta el carro y, ante el asombro del otro, quien creyó en un principio que su rival buscaría un garrote o algo así, lo que ve es que saca un grueso volumen. En la portada se lee: “Don Quijote de la Mancha”. Comienza la lectura.El otro grita:- Cuando lo termines, me lo prestas.Al leer esta historia, estoy seguro de que muchos pensarán: “yo co...
Carta a un joven…<br/>por Victorino Muñoz
118c, Rafael Victorino Muñoz

Carta a un joven…
por Victorino Muñoz

Pensé en titular este texto “carta a un joven escritor”; pero no sé si al final de leerlo quieras de verdad ser llamado así. Y es que, después de pasar más de treinta años tratando de escribir, me ha dado por pensar que tal vez elegí el camino equivocado. Digo, con treinta años trabajando como ingeniero, médico o abogado, serán pocos los profesionales que digan que no saben nada de lo que hacen, como digo yo hoy. Y algunos de ellos tal vez habrán obtenido algo de dinero y ahorrado. Pero yo ni eso. Tras tres largas décadas, no he ganado más que un poco de dinero por un premio (lo que gané me alcanzó para un almuerzo); y lo de las ventas de libros... ¿cuáles ventas? Lo peor es que cada vez que comienzo a escribir un nuevo libro parece que la experiencia no me sirve de mucho, a d...
El mundo como espejismo, por Victorino Muñoz
117a, Rafael Victorino Muñoz

El mundo como espejismo, por Victorino Muñoz

Día a día veo cómo hay cantidades de personas, de todas las edades, razas, condición económica, estado civil, orientación política y un largo etcétera, desviviéndose por darles likes y hacer comentarios en las cuentas de redes sociales de artistas, DJs, influencers, youtubers, deportistas, candidatos y demás celebridades surgidas de distintos sectores. Esto no tiene nada de malo en sí, ni lo voy a criticar. Cada quien pierde el tiempo de la manera que mejor le parece y cada vez disponemos de mejores recursos para perder el tiempo. Sin embargo, no deja de parecerme curioso, (y lo de curioso es un eufemismo), que las personas a las que admiran no sean realmente quienes son. ¿En qué sentido o por qué lo digo? Por varias razones. En primer lugar, lo que ven esas cuentas de redes, des...
Joselyn Break,<br/> por Victorino Muñoz
116c, Rafael Victorino Muñoz

Joselyn Break,
por Victorino Muñoz

Hace como unos diez años, estaba yo entrenando en el Misael Delgado de Valencia y coincidí con un grupo de corredores de élite, dirigidos por Luis Arias. Entre los que corrían en la pista estaban Lervis Arias y Yolimar Pineda, dueños absolutos, para ese tiempo, del fondismo en el país, pues ganaban prácticamente todas las carreras en las que participaban. Y Yolimar aún hoy día sigue siendo la única venezolana en haber competido en un maratón, tanto en juegos olímpicos como en mundiales.Además, había una chica que yo veía por primera vez. Joselyn Brea, tal era su nombre; tenía como 18 años entonces. Me dijeron que era de Valencia (Carabobo), pero competía en España; y venía de haber ganado el mundial juvenil de duatlón, especialidad que combina la carrera de fondo con el ciclismo.En el día ...
Ciudad de senderos,<br/> por Victorino Muñoz
115c, Rafael Victorino Muñoz

Ciudad de senderos,
por Victorino Muñoz

Soy un senderista un poco menos que aficionado, ya que lo practico de manera no tan asidua como quisiera, pues dedico mucho más tiempo a la carrera de fondo y también un poco al ciclismo.Sin embargo, el senderismo es una actividad que me atrae bastante. En otro momento profundizaré en sus ventajas. Por ahora, me quedo con una: contemplar la ciudad desde lo alto. Y es que soy un enamorado de Valencia, y me gusta verla en sus diversos ángulos.Afortunadamente, Valencia es una ciudad rodeada de muchas montañas y también de mucho verde, puesto que tenemos la doble suerte de que los cerros conservaron la capa vegetal y no fueron reemplazados los árboles por construcciones precarias, valga el eufemismo.Ahora, lo que quería decir es que para quien practica el senderismo, Valencia es una ciudad ide...
El último habitante,<br/> por Victorino Muñoz
114b, Rafael Victorino Muñoz

El último habitante,
por Victorino Muñoz

Dicen que en Venezuela el yagrumo (Cecropia peltata) es más común en la región de los Andes. Aunque también he leído que está extendido por buena parte de América Latina y el Caribe. Se trata de una planta alta, que llega a los veinte metros, de tronco no leñoso y hojas grandes, como en forma de una mano humana. Vistas de lejos, dichas hojas se ven como si fueran blanquecinas o hechas de ceniza. El yagrumo ha arraigado en Valencia. Pero, por alguna razón que no busco comprender, nace y crece en un hábitat muy curioso: las casas viejas, abandonadas, por no decir derruidas. Sobre todo las de construcción antigua, que tienen o tenían paredes de bahareque y techos de caña amarga. Cuando paso frente a una de ellas (abundan en el centro de la ciudad, por donde vivo), siempre echo un...
Un cafecito, por favor,<br/> por Victorino Muñoz
113b, Rafael Victorino Muñoz

Un cafecito, por favor,
por Victorino Muñoz

Desde el principio comienzo aclarando que soy tomador de café. Y aunque hay quienes dicen que esta infusión aromática también es una droga, yo difiero de esa visión. Tal vez sea adictivo y para algunas personas puede resultar dañino, pero no creo que cause el mismo impacto psicológico, familiar, social, en la salud y hasta en la economía, que tienen otras sustancias psicoactivas. Por ejemplo, quienes consumen drogas en cierto modo financian a los carteles que matan gente y que corrompen a los distintos estamentos de la administración pública en casi todos los países del mundo. No me dirán que eso pasa con el café. Hay quienes piensan que la solución sería legalizar la droga. En otro momento discutiré eso. Por ahora, les adelanto que el alcohol ya es legal, y sigue siendo tan pern...